Panorama sectorial de la industria aseguradora (2° trim. 2025)

Autor: MAPFRE Economics

Síntesis de conclusiones del informe:
MAPFRE Economics
Panorama económico y sectorial 2025:
actualización de previsiones hacia el cuarto trimestre

Madrid, Fundación MAPFRE, noviembre 2025

Entorno de crecimiento global

El endurecimiento de la política comercial de Estados Unidos, mediante la introducción de nuevos aranceles, junto con un entorno de incertidumbre geopolítica y regulatoria persistente, está reconfigurando los patrones de comercio global y generando potenciales disrupciones en la logística internacional. De hecho, el crecimiento del comercio internacional muestra signos de desaceleración, reflejando la normalización de los flujos de importación tras el aumento transitorio observado a inicios del año, impulsado por un adelantamiento de compras en previsión de nuevos incrementos arancelarios. Asimismo, en las economías avanzadas, el proceso de desinflación parece haberse detenido temporalmente. En particular, en Estados Unidos se observa una reactivación de la inflación subyacente de bienes, impulsada por un aumento de los costos de producción y una demanda interna aún resiliente, a pesar del endurecimiento previo de las condiciones monetarias.

También se anticipa un repunte temporal de la inflación en Estados Unidos durante 2026, explicado por los efectos de segunda vuelta derivados de los mayores aranceles, la política fiscal expansiva y la depreciación del dólar estadounidense, factores que podrían reavivar las presiones inflacionarias importadas.

Eso ha provocado que la actividad económica mundial proyectada permanezca estable, y en niveles moderados que, a pesar de un repunte del PIB global en el primer semestre de 2025, no se augura que ese dinamismo sea sostenible en el medio plazo.

Crecimiento nominal de las primas de seguros (2021-2026)

La dinámica del crecimiento nominal de las primas de seguros a nivel mundial (ver Gráfica 1) evidencia un proceso de recuperación desigual entre los sectores de Vida y No Vida. Este comportamiento está influido por factores como la volatilidad macroeconómica, las fluctuaciones en los tipos de cambio, así como los impactos de la inflación y las políticas monetarias globales. De cara al futuro, se prevé una estabilización nominal en el mercado asegurador global, tras un periodo marcado por alta volatilidad. Las proyecciones apuntan a un crecimiento anual promedio de 6,3% para el segmento de Vida y 5,5% para el de No Vida.

Gráfica 1. Global: crecimiento nominal de las primas

(crecimiento nominal anual en USD, %)

Contribución de los ramos de aseguramiento al crecimiento de las primas

Respecto a las contribuciones al crecimiento de las primas a nivel global, desagregadas por ramos de Vida y No Vida desde el primer trimestre de 2021 hasta finales de 2026 (véase Gráfica 2), se observa que mientras Vida tiene una contribución promedio del 2,7%, en un año donde los tipos de interés se mantuvieron en niveles bajos, lo que afectó los rendimientos de las inversiones de las aseguradoras y redujo el atractivo de los productos de ahorro tradicionales, por el contrario No Vida tiene una contribución promedio del 3,96%, impulsado por la fuerte reactivación económica global, y el aumento de la demanda de protección.

Por el contrario, en 2022, el ramo de Vida tiene contribuciones pequeñas o negativas, debido principalmente a la crisis del coste de la vida (recorte de contratación de este tipo de productos de ahorro) y con la subida continuada de tipos de interés para combatir la inflación, lo que provocó que los productos de ahorro tradicionales de los seguros de Vida perdieran interés frente a otras opciones de inversión con mayores rendimientos, como los bonos y otros instrumentos de renta fija. Sin embargo, los productos de No Vida tuvieron contribuciones positivas todo el año, con un aumento de las tarifas de las primas en respuesta a la creciente inflación y al incremento de los costes de las reclamaciones. Este aumento fue visible en los principales segmentos de No Vida, como los seguros de vehículos, salud y propiedad.

En 2023, la contribución de Vida durante los primeros trimestres del año fue negativa, pero en el segundo semestre el volumen de primas de seguros de vida en el mundo experimentó una recuperación significativa en términos nominales, aunque el crecimiento en términos reales fue mucho más moderado, esta recuperación representó un cambio positivo respecto a la contracción real observada en 2022, las aseguradoras vieron cómo sus inversiones en renta fija ofrecieron más rentabilidad y más atractivo a los compradores. Debido a los costos de aseguramiento, se incrementaron de forma generalizada las tarifas de los seguros y esto provocó que el volumen de primas de No Vida aumentara tanto en términos nominales como reales, recuperándose de la desaceleración que afectó durante los años anteriores.

A diferencia de la contracción en 2022 y la recuperación moderada en 2023, el volumen global de primas de seguros de vida experimentó un fuerte crecimiento en 2024, impulsada principalmente por el atractivo de los productos de ahorro y las anualidades en un entorno de tipos de interés altos. Este crecimiento fue especialmente notable en los mercados avanzados y fue complementado por la expansión en los mercados emergentes. El volumen global de primas de seguros de no vida siguió experimentando un crecimiento robusto y generalizado en 2024, impulsado principalmente por el continuo aumento de las tarifas de las primas en respuesta a la persistente inflación en los costos de los siniestros y al endurecimiento de los mercados de reaseguros, así como por una fuerte demanda de protección.

De cara a 2025 y 2026, se prevé que el crecimiento del volumen de primas en ambos segmentos de aseguramiento se desacelere, a causa de la ralentización del crecimiento económico global, impulsada por la incertidumbre geopolítica y las tensiones comerciales. Manteniéndose en todo caso positivas las contribuciones para el periodo 2025-2026, aunque el mercado de No Vida en mayor porcentaje en media (3,6%) que el segmento de Vida (2,8%).

Gráfica 2. Global: contribución de los ramos de aseguramiento

al crecimiento de las primas

La contribución al crecimiento de las primas Vida por regiones económicas (véase Gráfica 3), se observa una gran diversidad y volatilidad según los ámbitos geográficos seleccionados. A continuación, se hace un análisis de cada una ellas:

Gráfica 3. Global: contribución al crecimiento de las primas

Vida por regiones económicas

Norteamérica se consolida como el principal motor de expansión del mercado global de seguros de Vida, aportando de manera constante al crecimiento agregado incluso en fases de elevada volatilidad económica. Este comportamiento refleja la solidez estructural del mercado estadounidense, impulsado por un entorno macroeconómico caracterizado por políticas fiscales de apoyo a la renta disponible y una orientación monetaria más acomodaticia en determinados tramos del ciclo. Además, la elevada penetración de los seguros con componente de ahorro y jubilación ha actuado como un ancla de estabilidad financiera para los hogares, favoreciendo la acumulación de activos aseguradores. En este contexto, la resiliencia del sector en Norteamérica no solo se asocia a su capacidad de adaptación a las variaciones de los tipos de interés, sino también a la profundidad de su mercado de capitales y al papel contracíclico que desempeña el seguro de Vida como instrumento de previsión y gestión patrimonial.

Se observa que tanto la Unión Europea como el Reino Unido registran una aportación claramente contractiva al dinamismo global de las primas de seguros de Vida, especialmente entre el primer trimestre de 2022 y el tercero de 2023. Este retroceso responde, en gran medida, al endurecimiento de la política monetaria —con subidas sostenidas de los tipos de interés oficiales—, que ha incrementado la rentabilidad de los activos financieros alternativos y reducido el atractivo relativo de los productos de seguro ahorro. A ello se suma un entorno regulatorio más exigente (particularmente en materia de Solvencia II y sostenibilidad), así como un cambio estructural en las preferencias de los hogares hacia instrumentos de inversión más líquidos y de menor horizonte temporal. En conjunto, estos factores han generado un efecto de desplazamiento del ahorro financiero fuera del canal asegurador, limitando la expansión de las primas y afectando negativamente al crecimiento agregado del sector.

China mantiene una posición determinante dentro del mercado mundial de seguros de Vida, aportando de forma sostenida al crecimiento global, aunque con una trayectoria marcada por episodios de volatilidad. Tras un período de expansión impulsado por el aumento de la renta disponible y la consolidación de la clase media urbana, las contribuciones del país comienzan a moderarse a partir de 2022, en línea con la desaceleración estructural de su PIB potencial, el deterioro del sector inmobiliario y el menor dinamismo del consumo privado. Estos factores han limitado la demanda de productos de seguro ahorro y de largo plazo. No obstante, la reactivación observada desde la segunda mitad de 2024 sugiere una recuperación gradual del sector, apoyada en políticas de estímulo fiscal selectivas, un entorno monetario más laxo y un renovado interés por los instrumentos de protección y gestión patrimonial en un contexto de mayor incertidumbre económica.

La región de Asia emergente, excluyendo a China, muestra un desempeño favorable pero todavía contenido en su aportación al crecimiento global de las primas de seguros de Vida. Este comportamiento responde a la coexistencia de un elevado potencial de expansión, sustentado en el aumento de la renta per cápita, el dinamismo demográfico y la progresiva formalización del empleo, con limitaciones estructurales derivadas de la escasa profundización financiera y la reducida densidad aseguradora. En muchos de estos mercados, la falta de instrumentos de ahorro a largo plazo, la baja educación financiera y la limitada presencia de canales de distribución digitales restringen el desarrollo del seguro de Vida como herramienta de previsión y acumulación de capital. Sin embargo, la tendencia es claramente ascendente: la creciente bancarización, la expansión de los Microseguros y la adopción de marcos regulatorios más sólidos están sentando las bases para un proceso de convergencia gradual hacia niveles de penetración propios de economías más avanzadas.

Las economías avanzadas de Asia y Oceanía —con Japón como actor predominante en el segmento de seguros de Vida— mantienen un peso estructural elevado dentro del mercado global, aunque su contribución ha mostrado cierta debilidad durante 2022. Este comportamiento negativo se asocia a la combinación de un entorno de tipos de interés históricamente bajos, un envejecimiento demográfico pronunciado y la madurez del propio mercado asegurador, factores que limitan la expansión de las primas y reducen el margen de rentabilidad técnica. No obstante, a partir de 2023 se observa una recuperación gradual, impulsada por la normalización monetaria, la búsqueda de productos con mayor componente de rentabilidad financiera y la digitalización de los canales de distribución. En el caso japonés, la mayor demanda de seguros de protección y de ahorro para la jubilación refleja un comportamiento racional de los hogares ante la incertidumbre macroeconómica y la volatilidad de los mercados financieros.

En conjunto, en el horizonte 2025-2026, se proyectan valores positivos en todas las regiones, siendo Estados Unidos, la UE y UK, además de China los principales contribuidores al crecimiento del seguro de Vida el mundo. Asimismo, estará marcado por un reequilibrio regional del crecimiento y una creciente convergencia entre los seguros de Vida y los productos financieros de ahorro e inversión, en un entorno donde la innovación, la sostenibilidad y la educación financiera serán determinantes para sostener el desarrollo del sector asegurador global.

Respecto al crecimiento de las primas No Vida por regiones económicas (véase Gráfica 4), el análisis desglosado sería el siguiente:

 

Gráfica 4. Global: contribución al crecimiento de las primas

No Vida por regiones económicas

Estados Unidos se ha consolidado como el principal motor del crecimiento global de las primas de seguros No Vida a lo largo del período analizado. Si bien durante los tres primeros trimestres de 2021 su aportación al crecimiento fue negativa, a partir de entonces mostró una contribución positiva y sostenida, desempeñando un papel significativo en la expansión del mercado mundial en los años posteriores. Este comportamiento refleja tanto la magnitud y sofisticación del mercado estadounidense de seguros como la recuperación macroeconómica tras la pandemia, respaldada por políticas fiscales y monetarias expansivas. Además, el repunte se vio potenciado por el ajuste al alza de las tarifas en líneas comerciales, la creciente conciencia sobre la exposición a riesgos climáticos extremos y la adopción de estrategias de suscripción más prudentes que incorporan modelos avanzados de evaluación de riesgos.

La Unión Europea y el Reino Unido presentan una evolución heterogénea en su contribución al crecimiento de las primas de seguros No Vida. Durante el primer y segundo trimestre de 2022, registraron impactos negativos significativos, asociados a la desaceleración económica postpandemia, la incertidumbre geopolítica derivada de la guerra en Ucrania, la elevada inflación y la consecuente erosión del poder adquisitivo de los hogares. Estos factores afectaron tanto la demanda de seguros personales como la capacidad de las empresas para asumir nuevas coberturas. No obstante, a partir de 2023 se observa una recuperación gradual, aunque contenida, que sugiere una estabilización del entorno macroeconómico y financiero, así como un repunte en la contratación de seguros personales y comerciales. Este comportamiento refleja, además, un ajuste en las políticas de suscripción, el incremento de primas vinculadas a la inflación y la gestión más rigurosa del riesgo frente a siniestros, contribuyendo a la mejora de los ratios combinados.

China y los mercados emergentes de Asia han mostrado una contribución estable y ligeramente positiva al crecimiento global de las primas de seguros No Vida, aunque sin llegar a convertirse en motores significativos del sector a nivel mundial. En el caso de China, esta dinámica refleja la madurez de su mercado de seguros No Vida, caracterizado por altas tasas de penetración y densidad aseguradora, así como por limitaciones estructurales en el crecimiento económico, incluida la desaceleración del consumo interno y la exposición a riesgos crediticios y regulatorios. Por su parte, en los mercados emergentes de Asia, la modesta contribución se explica por el bajo peso relativo del sector asegurador en sus economías, la limitada cultura de seguros y la necesidad de fortalecer la infraestructura de distribución y gestión de riesgos.

El conjunto de regiones compuesto por Europa, Oriente Medio y África (EMEA) ha mostrado una contribución consistentemente marginalmente positiva al crecimiento global de las primas de seguros No Vida, caracterizada por una notable estabilidad a lo largo del tiempo, aunque sin un protagonismo decisivo. Esta tendencia refleja la fragmentación de los mercados regionales, con diferencias significativas en términos de penetración y densidad aseguradora, niveles de desarrollo económico y sofisticación de los marcos regulatorios.

En el caso de América Latina, a partir de 2023 se observa una recuperación gradual del crecimiento de las primas de seguros No Vida, tras el fuerte impacto económico derivado de la pandemia de COVID-19. Esta mejora, aunque moderada, refleja la normalización de la actividad económica, el fortalecimiento del consumo y la inversión, así como un entorno macroeconómico más estable, aunque en algunos países con una elevada inestabilidad política que puede entorpecer una gestión óptima del negocio asegurador.

En las economías desarrolladas de Asia y Oceanía, con Japón como principal referente, la evolución de las primas No Vida ha mostrado un patrón relativamente estable, pero con un crecimiento moderado. Esto refleja la naturaleza madura de estos mercados, donde la expansión estructural de la demanda de seguros está limitada por una saturación del mercado y un bajo crecimiento demográfico. En este contexto, las variaciones en el volumen de primas están más vinculadas a estrategias de reajuste de tarifas, ajustes de exposición al riesgo y optimización de portafolios aseguradores que a un aumento significativo en la penetración del seguro. Además, factores macroeconómicos como la inflación moderada, la estabilidad de los tipos de interés y la gestión prudente de reservas técnicas por parte de las compañías contribuyen a mantener un crecimiento sostenido.

En el horizonte de previsión para 2025–2026, se espera una consolidación de los patrones de crecimiento regionales en el sector de seguros No Vida. Norteamérica mantendrá su posición como principal motor de expansión, sustentada en la resiliencia de su economía, el continuo ajuste de tarifas en líneas comerciales y la creciente exposición a riesgos catastróficos vinculados a fenómenos climáticos extremos. Europa desarrollada y China seguirán en posiciones destacadas, impulsadas por estrategias de gestión de riesgo, renovación de pólizas corporativas y moderadas expansiones en penetración de mercado. Por su parte, las economías desarrolladas de Asia mostrarán un comportamiento estable. En conjunto, estas proyecciones sugieren que la dinámica del sector No Vida continuará concentrada en economías con marcos regulatorios sólidos, capacidad de adaptación tarifaria y elevada sensibilidad frente a riesgos emergentes, mientras que otras regiones aportarán contribuciones marginales al crecimiento global.

En el informe Panorama económico y sectorial 2025: perspectivas hacia el cuarto trimestre, elaborado por MAPFRE Economics, puede encontrar detalle de los cuadros macroeconómicos y de crecimientos de primas del mercado asegurador en 2025 y 2026 a nivel regional y para una selección de los principales mercados aseguradores.

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